Hoy acabo de perder una Amiga, mejor dicho una hermana, Sandra, mi amiga-hermana, que tantas cosas hicimos juntas, que antes de darnos al chimento nos encantaba crear historias, historias ridículas, cómicas, chistosas y en ellas caía quien caía segurito que si se enteraba terminaba riendo.
Hoy hago memoria y puedo decir que la conocí de toda la vida, pero en realidad fue hace más de 18 años, por diferencia de un mes ingresamos a UTE, que tiempos, éramos sapo de otro pozo, nos reíamos tanto que a veces nos mirábamos como si fuéramos tontas, pegaditos estaban nuestros escritorio y desde compartir el trabajo, los caramelos, las galletitas a inventar unos ridículos personajes (que éramos nosotras) en la novela de turno,
Si éramos hermanas que la vida junto en el trabajo, y fuimos creciendo y nuestra amistad se afianzo, crecimos, concursamos y en el trabajo tuvimos rumbos diferentes, pero nunca estuvimos lejos, cuando no podíamos reunirnos, rapidito salía una llamada y de cortito nos ponemos al día,
Me emocione cuando ella encontró el amor junto a Daniel, y fui participe de su felicidad, sus sueños se fueron cumpliendo, un esposo amoroso y compañero, luego de un tiempo llego su hermosa hija Valentina, tan linda y divertida, tan mimosa.
Le doy las gracias a Dios que mi Amiga-Hermana fue dichosa, además de su familia (de mama, papa y hermano) logro conocer la dicha de armar su familia con esposo e hija, también le doy las gracias por permitirme compartir este tiempo con ella,
Siempre sentí que los amigos van y vienen, que cada uno tiene una misión, que no importa el tiempo que estén con nosotros, este siempre es el que necesitamos, Se que fui bendecida al compartir este tiempo con Sandra, pero no me puedo conformar, solo tenia 42 años, era muy joven para morir y ella llego pisando fuerte, pero se fue sin darse cuenta siquiera de lo que sucedió,
Hay!!! Amiga, porque llego tu hora tan pronto, tu niñita es tan pequeña, tan niña, y tu compañero y esposo, tu madre, tu padre, tu hermano y todos tus amigos, todos te acompañan a tu ultima morada, a todos nos parece que es una pesadilla, nada de esto es cierto,
Sandra, si te llamo ¿tu me contestaras?, se que soy egoísta, pero quiero que regreses, te necesito amiga,
Te voy a extrañar un montón, por favor vela por nosotros, mil lagrimas de hoy no borran nuestra linda amistad, por el tiempo que me queda de vida te voy a recordar, tal vez me des fuerza, nunca te olvidare, gracias por compartir tu vida conmigo.
